El gobierno del Reino Unido tiene como objetivo establecer al país como líder mundial en inteligencia artificial, pero los expertos argumentan que una regulación efectiva es esencial para hacer realidad esta visión.
Un informe reciente del Instituto Ada Lovelace proporciona un análisis en profundidad de las fortalezas y debilidades del modelo de gobernanza de IA propuesto en el Reino Unido.
Según el informe, el gobierno tiene la intención de adoptar un “enfoque contextual y basado en sectores” para regular la IA, confiando en los reguladores existentes para implementar nuevos principios en lugar de introducir una legislación integral.
Si bien el Instituto agradece la atención a la seguridad de la IA, sostiene que la regulación nacional será fundamental para la credibilidad y las aspiraciones de liderazgo del Reino Unido en el escenario internacional.
Regulación global de IA
Sin embargo, a medida que el Reino Unido desarrolla su enfoque regulatorio de IA, otros países también están implementando marcos de gobernanza. China presentó recientemente sus primeras regulaciones que rigen específicamente los sistemas de IA generativa. Según lo informado por CryptoSlate, las reglas del regulador de Internet de China entrarán en vigencia en agosto y requieren licencias para los servicios de acceso público. También exigen la adhesión a los “valores socialistas” y evitar el contenido prohibido en China. Algunos expertos critican este enfoque como demasiado restrictivo, lo que refleja la estrategia de China de supervisión agresiva y enfoque industrial en el desarrollo de IA.
China se une a otros países, comenzando a implementar regulaciones específicas de IA a medida que la tecnología prolifera a nivel mundial. La UE y Canadá están desarrollando leyes integrales que rigen los riesgos, mientras que EE. UU. emitió pautas voluntarias de ética de IA. Reglas específicas como las de China muestran que los países están luchando por equilibrar la innovación y las preocupaciones éticas a medida que avanza la IA. Combinado con el análisis del Reino Unido, subraya los complejos desafíos de regular de manera efectiva tecnologías en rápida evolución como la IA.
Principios básicos del plan de inteligencia artificial del gobierno del Reino Unido
Como informó el Instituto Ada Lovelace, el plan del gobierno incluye cinco principios de alto nivel: seguridad, transparencia, equidad, responsabilidad y compensación, que los reguladores específicos del sector interpretarían y aplicarían en sus dominios. Las nuevas funciones del gobierno central apoyarían a los reguladores al monitorear riesgos, pronosticar desarrollos y coordinar respuestas.
Sin embargo, el informe argumenta importantes lagunas en este marco, con una cobertura económica desigual. Muchas áreas carecen de supervisión aparente, incluidos los servicios gubernamentales como la educación, donde el despliegue de sistemas de inteligencia artificial está aumentando.
El análisis legal del Instituto sugiere que las personas afectadas por las decisiones de AI pueden carecer de protección adecuada o rutas para impugnarlas según las leyes actuales.
El informe recomienda fortalecer las regulaciones subyacentes, especialmente la ley de protección de datos, y aclarar las responsabilidades de los reguladores en sectores no regulados para abordar estas preocupaciones. Argumenta que los reguladores necesitan capacidades ampliadas a través de la financiación, los poderes de auditoría técnica y la participación de la sociedad civil. Se requiere una acción más urgente sobre los riesgos emergentes de poderosos “modelos básicos” como GPT-3.
En general, el análisis subraya el valor de la atención del gobierno a la seguridad de la IA, pero sostiene que la regulación nacional es esencial para sus aspiraciones. Si bien acoge ampliamente el enfoque propuesto, sugiere mejoras prácticas para que el marco coincida con la escala del desafío. La gobernanza efectiva será crucial si el Reino Unido fomenta la innovación en IA mientras mitiga los riesgos.
Con la aceleración de la adopción de IA, el Instituto argumenta que la regulación debe garantizar que los sistemas sean confiables y que los desarrolladores sean responsables. Si bien la colaboración internacional es esencial, la supervisión nacional creíble probablemente será la base para el liderazgo mundial. A medida que los países de todo el mundo luchan por gobernar la IA, el informe proporciona información sobre cómo maximizar los beneficios de la inteligencia artificial a través de una regulación con visión de futuro centrada en los impactos sociales.